Hace casi un mes, mi ahijado Álvaro celebró su sexto cumpleaños (cómo pasa el tiempo). Para esta ocasión me pidió las "galletas pokeball" para los niños de su clase, y las "galletas Littlest PetShop" para las niñas. Las primeras son de fondant y las otras son de papel comestible.
Viajaron hasta Pinto (Madrid) y por primera vez no se rompió ninguna, menos mal...
Metiditas en su cajita, dispuestas a viajar.
¡Hasta la vuelta! Muaacccc.